
Los piropos han dejado de ser una forma de conquistar y halagar sólo a las mujeres, ¡despréndete de viejos prejuicios! Atrévete y llama su atención con el piropo adecuado en cada ocasión ¡no fallan!
Los piropos, como las monedas, tienen dos caras; por un lado está el piropo galante, que admira la belleza, pero sin rayar en lo vulgar, y el otro, el piropo subido de tono, que por el contrario tiene un contenido sexual explicito, por lo general demasiado descriptivo.
Así que conseguirás quienes se rían un poco con los piropos lanzados por las chicas. ¿Te animarías a hacerlo?
Aquí encontraras aquellos que sólo admiran la figura del caballero en cuestión, son piropos en esencia inocentes, aunque tiene ciertos guiños de picardía.

Piropos subidos de tono para hombres
Esa pequeña frase simpática, ingeniosa y pícara en el piropo puede resultar de lo más útil a la hora de acercarte a alguien que te gusta, romper el hielo en un primer encuentro o para sorprender y halagar a tu pareja. ¡No te cortes!, un piropo subido de tono y dicho con gracia, sin caer en vulgaridades, sienta bien y puede provocar sonrisas y sonrojos a partes iguales.
Solo selecciona cual elegir de esta lista y será perfectos para decirle al oído en su momento oportuno:
- Juguemos a la Maga, yo te echo dos polvos y desaparezco.
- Papi bájame el fuego con tu manguera.
- ¿Quién fuera manguera? Para posarme en esa rama.
- Tú no sabes el desorden de emociones que me provocas con tu sonrisa.
- Eres como el chocolate, me antojas cada ratito.
- Tengo unas ganas de ti que no se me quitan, se acumulan.
- Si fuera vampira me clavaras tu estaca.
- Mi amor quien fuera cemento, para sostener ese monumento.
- Papi si así está el camino, cómo estará el pueblo.
- Si fuera yo el aliño, tú serias mi chorizo preferido.
- Apenas una tentación como tú para una pecadora como yo.
- No he de morir para ver el paraíso, estando a tu lado, lo he visto todo.
- ¿Jugamos al cieguito? Tú eres el libro en Braille y yo te leo las perforaciones.
- Bueno ¿qué? digo una tontería o nos vamos directo a la cama.
- No tengo pelos en la lengua porque tú no me dejas.
- Eso sí es una punta, y no lo que le quita mi abuela a los tomates.
- Como quisiera ser una mona, para ir de una rama al palo hasta llegar a tu cama.
- Me gustan tus ojos, me gustan tus celos, pero lo que más me gusta es tu trasero.
- Mamita, aprovecha cuando amanece que es cuando el pequeño travieso crece.
- Cómo me gustaría ser heladero para que chuparas ¡Sin parar!

Piropos para hombres sexis
Si te apetece decirle a un chico ¡guapo! no creas que va a resultar demasiado atrevido. El papel tranquilo y pasivo de la mujer ha dejado de ser así. Encuentra el momento oportuno y prueba, por ejemplo, con estos piropos.
Generalmente los hombres no están acostumbrados a los piropos así que, podrás observar su reacción y ver su cara de sorpresa cuando tomes la decisión para decirles algunas de estas divertidas frases, te resultará de lo más entretenido y muy interesante.
- ¡Qué maravilla la que hace Dios cuando está contento!
- Por semejante bombón ¡hasta la dieta la dejo!
- Si estar bueno es pecado ¡me la pasaría pecando!
- Galán ¿Dónde llevas tu alarma?
- Lo tuyo no es estar maduro, es estar exquisito.
- Eres como un iPad, bonito, fino y que dan ganas de tocar.
- Mi corazón es un aparador y tú el muñeco que quiero
- En el karaoke del amor, tú eres mi canción favorita.
- Tu nombre salió en mi galleta de la suerte.
- Te doy un vale por un beso mío. Puedes cambiarlo cuando quieras.
- ¿Quieres ir conmigo a tomar un café? Levanta la mano derecha para sí o la izquierda para claro que sí
- Además de ser sexy, ¿a qué otra cosa te dedicas?
- Mis brazos pueden ser tu envoltura, cupcake.
- Eres el Paracetamol que siempre me receta el doctor.
- Te veo muy tenso, necesitas besoterapia para relajarte.
- La primera vez que te vi necesité un diccionario, porque me quedé sin palabras.
- Apenas una tentación como tú para una pecadora como yo.
- Me debes un trago, porque cuando te vi se me cayó el mío de la impresión.
- ¿Acaso te llamas Nemo? Porque he estado buscándote.
- Me pones tan nerviosa que hasta se me olvidó el piropo que te iba a decir.
- ¡Acabo de encontrar al padre de mis hijos!
- Mi celular debe estar fallando, porque no tiene tu número guardado.
- Espero que sepas RCP, porque me quedé sin respiración cuando te vi.
- ¿Eres coleccionista? Porque creo que me robaste el corazón.
- Tengo algo en los ojos, creo que se me metió tu sonrisa y no se me quita.
- ¿Me estás hablando a mí? ¿No? Bueno, empieza ya.
- Eres como una cámara, cada vez que te veo, sonrío.